Ihrem kampf (Su lucha)

Siempre es una buena noticia literaria la publicación de algún libro, aunque a veces sus hojas sirvan para poco más que para limpiarse...

   

El todopoderoso Aznar, acaba de publicar la primera parte de sus memorias, a la que seguirá sin duda una segunda y no sabemos si una tercera, cual saga del "señor del España va bien" y aunque no estoy por la labor de inspeccionar su contenido, supongo que será un ejercicio de memoria, de mala memoria.

Es digno de resaltar, que en la presentación de sus escritos el lleno ha sido total, desbordando las mejores expectativas del señor del “toblerone en el estomago” y sus acólitos.

Claro, el foro de la presentación ha sido en su club de fans, y ya se sabe lo locos que son esos seguidores incondicionales de los famosetes, que rompen en lagrimas solo al ver la fantástica imagen de su ídolo, aun siendo persona poco agraciada.

Cuentan que en sus páginas, dicen, como propuso a Rato que fuese su sucesor, y como término eligiendo al mediocre y dubitativo Rajoy como única y desesperada alternativa. Él sabia que aun siendo un absoluto inútil, la mala imagen cosechada con mimo por el partido socialista conseguiría llevarlo a la Moncloa.

Rajoy, fiel alumno de tan “trabajado” maestro, ha ido cumpliendo con la difícil misión de convencer al pueblo que la culpa de todos los males de España es de los anteriores gobernantes. Y sigue en esa tarea…

Asumo que en las páginas de ese celebrado volumen no aparecerá ni por asomo como fue él mismo el que inicio a pleno pulmón el llenado de la fastuosa burbuja inmobiliaria que ha desembocado en la crisis que ahora padecemos.

Supongo que tampoco hablara de Camps, ni de las luchas intestinas de su partido, ni de las mentiras cuando la guerra del golfo, ni de los amiguitos del alma de su yerno, ni de la inutilidad de su ensalzada esposa.

Eso, no es parte del libro que quieren leer sus seguidores.

Allí hablara de la existencia nunca descubierta de las armas de destrucción masiva, de la necesidad de destruir un país para después intentar reconstruirlo, de como apoyó la venganza programada de Bush contra Irak, del ejemplarizante funcionamiento de las administraciones del PP en tiempos del gobierno de González y Zapatero, de lo "inútil" que han sido los mismos para España y de que son suyas, de ellos, y de nadie más las culpas de nuestros males.

Seguirá diciendo y pensando, y alentando la farsa sobre la responsabilidad de ETA en los atentados de Madrid que le costaron el gobierno y mentirá, según su costumbre, a la hora de hablar de su pasado.

Seguirá vendiéndonos su imagen de súper líder y mostrándonos orgulloso sus fotos "informales", casi familiares, con los pies sobre una mesita baja en la Casa Blanca (suerte que esta visita la hizo el, que cuida tan exquisitamente la imagen de España y no su recomendado que nos enseñaría, con lo malo que es para nuestra imagen de país sobrado y de nuevos ricos, unos calcetines roídos por el tiempo y por la misma miseria que pone ahora en el país).

Es triste, para mí, ver como la hipocresía de la derecha triunfa de forma tan "popular"

Es triste, para mí, ver como se mantienen en el orgullo (falso orgullo) de ser los grandes dirigentes que encumbraron el país internacionalmente a un lugar indeseado, como nos llevaron a una guerra injusta y como facilitaron la crisis de la que ahora nos quieren salvar.

Es triste, para mí, ver el aire de suficiencia que muestran en sus comparecencias, las sonrisas de desprecio por todo lo que no tiene que ver con ellos y sus medidas, la postura altiva del que sabe que tiene el poder y no se lo van a quitar.

Es muy triste para mí.

Mientras tanto, siguen fielmente la hoja de ruta diseñada por la derecha y por los ricos, escrita letra tras letra por los ideólogos del fascismo refugiados dentro de la fabrica de ideas antisociales que es la indignante, y por cierto soportada desde el bolsillo de todos los españoles, FAES (acrónimo de Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales, pero que en realidad esconde tras sus siglas a la Fundación Aznar En la Sombra), siguen recortando nuestros derechos, siguen destrozando la estructura social de años de lucha, rompen con todo lo aceptado e imponen nuevas normas y leyes que rozan lo inconstitucional.

Muy triste

Ahora, el Sr. Aznar, en un importante e inoperante ejercicio de egolatrismo, se pasea por los medios hablando de Su libro, de Su España, de Sus ideas, de Sus aciertos, de Sus amigos... Ronda por nuestras pantallas diciendo que hay que ver lo malo que son los nacionalismos exacerbados como el de Mas, que por cierto se ha venido a Menos, haciendo cátedra de sus ideales, hablando, mintiendo, falseando, sonriendo con orgullo, exculpándose y exculpando a los suyos, culpando a los otros, defendiendo esos ideales que ya trasmitió otra persona de características físicas y mentales muy parecida a él en otro nefasto libro titulado "Main kampf" (Mi lucha) de la que es, no me quedan casi dudas, firme admirador e imitador hasta el punto de lucir parecido mostacho...

La política española se viste una vez más de hipocresía y se vende en los anaqueles de las librerías cual libro de texto que debamos aprender de memoria.

Muy triste...

La derecha, los políticos en general, se creen cargados de razones, para cargar contra los ciudadanos, culpabilizándolos de una crisis creada y montada por ellos mismos, por los que pagan sus campañas y por los que consiguen los abultados y siempre golosos contratos públicos.

Se creen en la razón, aún habiéndola perdido.

Se creen que las papeletas recogidas en las urnas, que cual lotería les otorga un breve, que si breve dos veces bueno, periodo de mandato, es un cheque en blanco para jugar con nuestro futuro, para borrar el pasado y hacernos vivir en un presente lleno de obstáculos, incertidumbres y penurias, cuando esas papeletas son en realidad solo la concesión de un voto de confianza temporal que rápidamente pierden cuando llegan al poder.

Se creen que somos idiotas...

Muy triste

Sin duda, deberíamos escribir un nuevo libro, desde la perspectiva del pueblo, que bien podríamos titular "Der kampf aller" (La lucha de todos)

Me disculpen si mi alemán no es del todo correcto…

Jose Ramiro, bloguero